Año 11

Guillem Viladot

POEMA DEL HOMBRE

La obra que día 16 de julio de 2022 se inauguró en La Vinya dels Artistes, fue creada en el año 1972. Viladot confeccionó en formato póster el Poema del hombre, con la colaboración de Josep Iglésias del Marquet . Justo un año después se materializaría en formato libro y se iniciaría la trilogía de trabajos que girarían en torno a este concepto antropocéntrico. En esta obra, la sucesión de letras del abecedario colocadas por parejas -la misma letra del derecho y del revés- genera un espacio entre ellas donde se insertan varias palabras. La primera de estas palabras se piensa en la que siguen toda una serie de palabras que indican partes del cuerpo: desde la frente hasta los pies. Un recorrido vertical, pues, donde las letras incorporan —nunca mejor dicho— la propia carne y, finalmente, la envían hacia la utopía a la que nos invitan las ultimas palabras del poema: pasa, camino, horizonte, luz y libertad. Ahora, alejadas del papel, las letras del abecedario y las palabras que las acompañan se esparcen por un espacio monumental que otorga al proyecto original una dimensión casi teológica. Guillem Viladot, el hombre, y su poema, son línea y pilastra, voz y paisaje.

El “Poema del Hombre” que se inauguró en La Vinya dels Artistes es una interpretación de Jaume Farreny que parte de la “Poesía Concreta” para dibujar un “Poema Arquitectónico”. De la producción ejecutiva se ha encargado Joan Jové Solé, herrero, copropietario de la bodega Mas Blanch i Jové, y el artesano que da forma a las diferentes creaciones expuestas a este espacio tan singular que es La Vinya dels Artistes.

La obra fue previamente presentada en La Seu Vella de Lleida donde fue expuesta de forma temporal. Y es La Vinya dels Artistes, una sala de exposición al aire libre entre viñedos y olivos, el lugar que la acoge a partir de ahora. El lugar escogido es una pared de piedra seca sobre un campo de cultivo. Las letras sobrevuelan el espacio y, al tratarse de una zona de fuerte marinada, el poema parece bailar con los olivos. Las palabras ojos, nariz, labios, manos, dedos, vientre, sexo, pasa, camino, horizonte, hombre, libertad… Se funden con la piedra, la naturaleza, el cielo, el infinito.

La inauguración que se celebró el 16 de julio contó con más de 500 asistentes que también pudieron visitar otras esculturas que se encuentran en La Vinya dels Artistes, las obras expuestas de forma permanente en la bodega y una exposición temporal de Guillem Viladot en el Espacio Saó de la bodega.

La fiesta totalmente al aire libre consistió con una cena de pie maridada con los vinos de la bodega Mas Blanch i Jové, la actuación del grupo teatral agramuntí Teatredetics y la música de Lo Pardal Roquer, con una canción creada en homenaje a Viladot .

«Ahora, alejadas del papel, las letras del abecedario y las palabras que las acompañan se esparcen por un espacio monumental que otorga al proyecto original una dimensión casi teológica. Guillem Viladot, el hombre, y su poema, son línea y pilastra, voz y paisaje»

«El “Poema del Hombre” que se inauguró en La Vinya dels Artistes es una interpretación de Jaume Farreny que parte de la “Poesía Concreta” para dibujar un “Poema Arquitectónico”.»

Pau Minguet

Fotos: Albert Malet, Elsa García i Montse Solà

Inauguración. La Fiesta del Año 11 en La Viña de los Artistas

Màgnum Edició Col·leccionista Eva Lootz

Màgnum edició col·leccionista 
Guillem Viladot

Carlos Pazos

Guillem Viladot
Agramunt, 1922 – Barcelona, 1999

Guillem Viladot Puig nace en Agramunt en 1922, en una familia de boticarios. Tras pasar su infancia y buena parte de juventud en Agramunt, se traslada a Barcelona para estudiar Farmacia en la Universidad de Barcelona. En 1949 se licencia y vuelve a instalarse en su pueblo natal para trabajar en la farmacia de su padre. En 1950 cae enfermo y, convaleciente, escribe Tiempo de estreno, iniciando un ciclo de novelas que definen su mito de Riella, topónimo ficticio de Agramunt: Los niños de Riella (1965), Aril Avall (1966), La gente y el viento (1967), La raíz de panical (1970) y Memoria de Riella (1974).

Paralelamente a la obra discursiva, en 1959 escribe Metaplasmas y en 1960 IA-URT que inician sus experiencias como poeta concreto, desestructurando los códigos alfabéticos y lingüísticos. Se convierte en precursor de la Poesía Concreta (un subgénero de la Poesía Visual) y el primer editor de un libro de este tipo en España, con la obra Estrips que edita en Agramunt en 1964, y con los Nou-plast- poemas de 1965, motivando todo un trabajo como poeta visual que desarrolla a lo largo de su trayectoria.

A finales de los años setenta se interesa por el psicoanálisis, que integra a su ensayística con novelas como Ricard (1977), La ley de piedra (1979), El dueño (1982) o Discurso horizontal (1982). Estas obras preceden al ciclo de novelas históricas de carácter también psicológico, como Joana (1991), o Carles (1994) y las recopilaciones de su poesía completa, reunida en cinco volúmenes, así como sus últimas novelas: Los ojos (1999), Las velicosidades (1999), Ruth (2000) y La energía (2001).

Cultivó un amplio abanico de manifestaciones artísticas, tanto literarias como plásticas. El cuestionamiento de las convenciones literarias le llevó a menudo a las fronteras entre géneros. Como creador mostró una actitud disidente y marginal frente a las distintas formas de poder. Son una muestra las novelas La ceniza (1970), Ricard (1976), El dueño (1980), Memorial de Na Nona (1983), Carlos (1994), Autobiografía de Dios (1998), entre otras.

Pero también debe hablarse de su obra poética, con una vertiente experimentalista que le lleva al poema-objeto y también a la prosa poética, siempre desde una lectura exhaustiva de la vanguardia. La suya fue una obra que rezumaba modernidad durante los años difíciles de la posguerra, y que fue publicando en pequeñas ediciones de autor hasta los años 80, cuando sale en Edicions del Mall su celebrado Amor físico (1983). Desde entonces, varias editoriales -Mall, Columna, Pagès- han llevado a cabo la tarea de sacar a relucir sus poesías completas, que han sido reunidas en cinco volúmenes, el último de ellos publicado de forma póstuma: Poesía Completa V (2004).

Colaboró ​​en las revistas y diarios La Mañana, Segre, La Vanguardia, Diario de Lérida, El Observador, Hoy, El Periódico (suplemento de Lérida), Labor, Ciudad, Destino, Sión, Oriflama y Sierra de Oro. Durante los años noventa abre en Agramunt los edificios de Lo Pardal, una casa dedicada a la Poesía Visual, que desde el año 2000 acoge hoy la Fundación Privada Guillem Viladot, un museo dedicado a preservar su memoria.

Ha sido socio honorario de la Asociación de Escritores en Lengua Catalana y recibió la Cruz de Sant Jordi en 1993.